Somos Javier y Emilio García, una pareja de hermanos que hace unos años detectó dos de los principales problemas cotidianos que surgen en las familias. Uno es la falta de espacio en las viviendas, y el segundo es la falta de seguridad en las comunidades de edificios cuyos trasteros no son seguros.
Apreciando igualmente, que el sector del autónomo, también muy extendido en nuestra región, estaba cada vez más castigado por la crisis ya que tenían que utilizar sus propias viviendas o vehículos para guardar herramientas y materiales, nosotros queríamos dar la posibilidad de despejar su espacio privado, ofreciéndole además el servicio de recepción o expedición de mercancías. Y fue así como la idea de crear Autoalmacenamientos Poniente comenzó a tomar fuerza.
Tras un largo tiempo estudiando el sector y tras algunos años de espera debido a los frenazos por parte de la administración, en el segundo trimestre de 2015, Autoalmacenamientos Poniente vio la luz y el pueblo almeriense pudo por fin acceder a este servicio.
Decidimos ubicar el centro en una nave industrial en régimen de alquiler de poco más de 900 m2, situado en la Ciudad del Transporte de La Mojonera, salida nº 420 de la autovía A-7, un polígono en auge y céntrico de la comarca del poniente de Almería, localizado entre grandes núcleos de población tales como La Mojonera, Vícar, El Ejido y Roquetas de Mar.
Inicialmente, y debido al capital existente se diseñaron unos 400 m2 de trasteros y zonas comunes, repartidas en cuatro pasillos. Introdujimos también una sala dotada convenientemente, encaminada al pequeño autónomo para reunirse en alguna ocasión de forma confortable, rápida y cercana a su “almacén”.
Al cabo de los años, y viendo que los módulos iban ocupándose, contando con el permiso del “señor banco”, decidimos ampliar una segunda fase hasta completar la superficie del total, alargando unos de los pasillos hacia los nuevos módulos e instalaciones técnicas, consiguiendo en el pasado año unos 800 m2 netos para alquiler divididos en unos 100 módulos, con superficies individuales cuya horquilla abarca desde 1 hasta 17 m2.
En nuestra corta experiencia pensamos que el self storage es una actividad que puede resistir en el futuro, aunque estabilizado debido a la incertidumbre actual que nos azota a toda la sociedad. Donde la posible disminución del poder adquisitivo del ciudadano provoca que vaya deshaciéndose de lo superfluo y entre esto, el alquiler de un espacio extra, sin mencionar el incremento que puede existir por impago de los recintos.
Decidimos incorporarnos a AESS ya que, al iniciar la andadura en esta actividad, muy desconocida a nivel personal, se nos presentaba una gran nube de dudas, sobre todo jurídicas. Cómo realizar contratos, tratamiento de impagados, buscador de proveedores… Por ello, decidimos asociarnos; para tener una fuente de información, abundante y fidedigna.