Según los datos de AESS de enero de 2016, el sector del Self Storage en España sigue creciendo, superando ya los 300 centros. Esto se debe tanto a que han surgido nuevos operadores, como a la expansión de nuevos centros por parte de operadores con otros ya operativos. Los datos también nos indican que son 5 las provincias que se incorporan al sector con uno o más centros operativos, Sin embargo, según este estudio todavía hay 15 provincias sin este servicio, lo que convierte al Self Storage en un mercado por explotar y al que poder sacarle mucho partido de un modo empresarial.
Barcelona (104) y Madrid (78) siguen liderando el ranking de mayor número de centros, seguidos por las provincias de Valencia (20), Málaga (12) y Alicante (10). A nivel de ciudades, después de Barcelona (48), Madrid (41) y Valencia (11), aparecen Leganés (8), L’Hospitalet de Llobregat (7) y Sabadell (7).
Proporcionalmente a estos datos Cataluña, Madrid, la Comunidad Valenciana y Andalucía suman el 82% de las comunidades en las que se localizan más centros de Self Storage.
La demanda de servicios por parte de los autónomos, la apertura de centros urbanos en las grandes ciudades y un mejor optimismo del sector – reflejado en la última conferencia de Self Storage organizada por AESS en octubre – son varios de los motivos de este crecimiento.
A diferencia de otros mercados europeos, en el mercado español (a excepción de un operador con el 10% de los centros) la mayoría de operadores gestionan un solo centro.
¿Hay espacio para nuevos centros?
Según el Informe Anual de Self Storage de FEDESSA 2015, los países del norte de Europa duplican la oferta de centros/metros cuadrados por habitante en España. Además seguimos muy lejos de EE.UU. (país donde nació el servicio) o Australia en cuanto a cantidad de almacenes. Por ello, el crecimiento de centros en el mercado español todavía podría ser mayor con el paso de los años. Sin duda una gran oportunidad empresarial para todos aquellos emprendedores que estén interesados en gestionar un centro de Self Storage propio.